PLIEGOS DE LIJO Y GARCÃA-MANSILLA
10-03-2025
El PJ prepara la resistencia a Milei en el Senado
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La oposición dura intentará frenar la designación por decreto de los jueces para completar la Corte Suprema de Justicia. La convocatoria a sesión depende de Victoria Villarruel, que quedó expuesta en la apertura de sesiones ordinarias y que rechaza con firmeza la nominación del juez federal que aún no juró como ministro del máximo tribunal.
El peronismo enfrenta semanas clave en el Senado. Tendrá una oportunidad para dar muestra de unidad y fortaleza si la vicepresidenta Victoria Villarruel -que quedó expuesta en la apertura de sesiones ordinarias y rechaza con firmeza la nominación de Ariel Lijo- convoca a la sesión para tratar los pliegos de los jueces nombrados por decreto de Javier Milei, pero el escenario no está claro.
Antes de la convocatoria, los pliegos deben ser tratados por la Comisión de Acuerdos, que preside Guadalupe Tagliaferri, que responde a Horacio Rodríguez Larreta y que es la única senadora del PRO que los rechaza.
El peronismo presentó un dictamen con las firmas de Anabel Fernández Sagasti, Alicia Kirchner, Juliana Di Tullio, Lucía Corpacci, Sergio Uñac y Claudia Ledesma Abdala para rechazar el pliego de Manuel García-Mansilla. Pero también lo hicieron el senador radical Martín Lousteau y la propia Tagliaferri. Solo resta una firma para que puedan llevar el tratamiento al recinto, si no lo consiguen necesitarán dos tercios de los presentes para tratarlo, un número difícil de conseguir.
Una vez completado ese paso, será Villarruel la que defina si convoca a la sesión. Si bien la titular de la Cámara alta no tiene diálogo con la Casa Rosada, en el PJ saben que es orgánica con el espacio libertario. Sin embargo, presionada para que ponga fecha al debate, podría terminar justificando una decisión en ese sentido.
Para rechazar el pliego de ambos jueces en el recinto, la oposición necesita 25 votos a favor de esa postura y el peronismo, si logra sortear el desafío de mantenerse unido, tiene 34.
Otra opción es que se habilite el debate en el recinto del decreto de Milei para que el Senado lo apruebe o lo rechace.
Manuel García-Mansilla ya juró como juez del máximo tribunal, por lo que cualquier decisión que tome el Senado entrará en vigencia cuando finalice el período de sesiones ordinarias, sostienen como argumento en Balcarce 50, pero en la oposición dura cuestionan incluso que se le haya tomado juramento y que haya votado en una primera acordada horas después.