Recomiendan vacunar a quienes nunca lo hicieron
19-01-2017
Fiebre amarilla: aumentó emisión del certificado de vacunación
09:43 |
Según el Calendario Nacional, para quienes vivan en Corrientes y Misiones es obligatorio aplicar las dosis a los 18 meses, y un refuerzo a los 11 años. Recomiendan vacunar a quienes nunca lo hicieron.
En las últimas horas autoridades sanitarias de Brasil confirmaron la muerte de 47 personas por contraer fiebre amarilla, en tanto que hay otras 100 más diagnosticadas con este mal.
El panorama de la propagación es alarmante para Argentina si se considera la proximidad geográfica, y más aún para provincias como Corrientes o Misiones consideradas riesgosas por la alta presencia que tienen del mosquito Aedes aegypti, que es el vector de esta enfermedad.
En este contexto es que desde la Unidad Sanitaria Federal de la Provincia confirmaron que en la última semana aumentaron los certificados internacionales de vacunación, como así también desde el Ministerio de Salud Pública de la Provincia advirtieron un incremento en las aplicaciones.
En diálogo con época, una de las referentes de la Unidad Sanitaria Federal - Corrientes, Milagros Prichinich Marinich, explicó: “El Ministerio de Salud Pública de la Nación dispuso que para quienes habiten en Corrientes o Misiones, la vacuna es obligatoria a los 18 meses a diferencia de las otras provincias. Pero como esta disposición es relativamente nueva hay una gran parte de la población que está desprotegida. A este grupo que nunca recibió la vacuna es que se recomienda especialmente la aplicación, y más si viaja a Brasil”.
Según figura en el sitio web del Ministerio de Salud Pública de la Nación, la vacuna contra la fiebre amarilla fue incorporada al Calendario Nacional de Vacunación en el 2007. En la resolución 857/2007 se especifica que está destinada de manera obligatoria para quienes residan en zonas de riesgo, entendiéndose a éstos como aquellos departamentos de la república limítrofes a países endémicos.
Desde Nación recomiendan a los argentinos la aplicación de la vacuna pese a que ni Brasil ni Paraguay la exigen. En tanto que hay países que sí es obligatoria como Colombia, Costa Rica, Perú, o Bolivia, por mencionar sólo algunos.
Refuerzo, ¿sí o no?
Si bien en el cuadro del Calendario Nacional de Vacunación se especifica que debe aplicarse una dosis a los 18 meses y otra a los 11 años, desde el Ministerio de Salud Pública de la Provincia y desde la misma Unidad Sanitaria Federal Corrientes informan que con una única aplicación de la dosis es suficiente para conferir inmunidad y protección de por vida, sin necesidad de dosis de refuerzo. Si bien anteriormente se creía necesario actualizar la dosis cada diez años, aseguraron que esto no es aconsejable en vistas de posibles efectos colaterales.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) en zonas de riesgo sólo es necesaria una dosis, la posibilidad de que el cuerpo entre en contacto con la enfermedad por segunda vez antes de perder la protección es grande. Este contacto refuerza la creación de anticuerpos y funcionaría como una segunda dosis.
La enfermedad
Según informa el Ministerio de Salud de la Nación, la fiebre amarilla es una enfermedad viral que se transmite por la picadura de un tipo de mosquito, que previamente ha picado a una persona enferma y de esa manera se ha infectado. No se contagia a través del contacto personal, por objetos ni por la leche materna.
Se llama fiebre amarilla porque a muchos de los que se enferman se les pone la piel de ese color. En los casos más graves puede provocar falla hepática, renal, cardíaca y hemorragias generalizadas con una alta tasa de mortalidad.
Se calcula que cada año se producen en el mundo 200 mil casos de fiebre amarilla que causan unas 30 mil muertes. El número de casos ha aumentado en los dos últimos decenios debido a la disminución de la inmunidad de la población, la desforestación, la urbanización, las migraciones y el cambio climático. En Argentina, las principales zonas de riesgo son las provincias de Misiones y Formosa, y aquellas zonas limítrofes con Brasil, Bolivia y Paraguay.
Los síntomas iniciales pueden ser similares a los de una gripe e incluir fiebre, dolor de cabeza, vómito y dolores musculares. A medida que la enfermedad progresa, sangran las encías y la orina también contiene sangre. Puede aparecer también ictericia (coloración amarilla de la piel).